El salón es nuestro lugar preferido de la casa, y el sofá es su estrella. En él pasamos horas descansando, momentos de diversión con amigos, veladas en familia y un sinfín de experiencias.
Saber qué sofá comprar es importante tanto por su estética como por su comodidad. Queremos poder pasar horas en uno, que sea cómodo, que quede bien con la decoración y que dure mucho tiempo.
Es una inversión importante y queremos acertar.
¿Cómo elegir el sofá correcto para nuestro salón?
Lo primero que debemos hacer es valorar el lugar en el que lo vamos a poner y la función que realizará.
No sirve de nada elegir un sofá simplemente por lo bonito que nos parece si luego no lo vamos a poder usar bien.
Vamos a daros unas claves sencillas para escoger el que mejor se adapte a vuestras necesidades y preferencias.
Tipo de Sofá
Para elegir el mejor tipo de sofá hay que pensar primero en el lugar y la función que va a cumplir.
Hay quien prefiere un sofá sencillo porque no pasa mucho tiempo en él, y hay quien, después de probar los asientos reclinables ya no puede vivir sin ellos.
Si pasamos mucho tiempo en él necesitaremos algo cómodo, si por el contrario, cumple una función más decorativa, podemos centrarnos más en su estética. También tendremos que tener en cuenta si tenemos niños/as o mascotas en casa. Lo fundamental es encontrar el sofá que vaya acorde con tu estilo de vida.
Por último, no debemos olvidar que sigue siendo un elemento más del conjunto de la sala, y por eso debe ir acorde con la decoración del salón. Si tenemos una decoración minimalista, el sofá debería ser sencillo. Actualmente están muy de moda los sofás de estilo nórdico, de diseño limpio y poco recargado que aporta luminosidad y modernidad.
Diferencias entre un sofá de piel y uno de tela
Es importante también la elección de la tapicería del sofá, vamos a ver las diferencias que hay:
Características de los sofás de piel
- Son sofás más vistosos y con un aspecto vintage más moderno.
- Combinan mejor con todo tipo de muebles y lucen más.
- Son más fáciles de limpiar.
- El color más vendido en los sofás de piel es el blanco.
- Son más caros y necesitan más cuidados, cada 6 meses hay que pasarle un poco de cera, para que la piel no se cuartee.
- En invierno son fríos y en invierno calurosos.
- No transpiran y la sensación de calor es mayor.
- Los que son de polipiel con el tiempo se acaban despellejando.
Características de los sofás de tela
- Son sofás más clásicos y estéticamente no lucen tanto.
- Es importante elegir bien el color y al textura del tapizado.
- Son más difíciles de limpiar, hay que usar productos especiales para telas.
- Hay que lavar las fundas cada cierto tiempo.
- Son más económicos y el tapizado dura más años.
- En invierno no están fríos y en verano permiten la transpiración sin que haya sensación de calor.
- Son más suaves y agradables al tacto.
- En invierno son fríos y en invierno calurosos.
- No transpiran y la sensación de calor es mayor.
- Los que son de polipiel con el tiempo se acaban despellejando.
Tamaño y modelo del sofá
Lo primero que hay que hacer es pensar en el espacio disponible y en cuantas personas van a usarlo. Es importante tomar las medidas para que se ajuste al espacio.
En estancias pequeñas los asientos para dos personas son perfectos, pero en un gran salón podría perderse y no conseguir un equilibrio.
En estancias grandes, un sofá de 3 personas o más aporta la presencia necesaria pero puede conseguir que la habitación sea agobiante si no es lo suficientemente espaciosa.
Hay muchos modelos distintos, sofás en L, sofás rinconeros, sofás modulares, ergonómicos, Chaise Longue, normales, sofás Chester, etc.
Consejos para elegir un sofá
- Para habitaciones con pocos metros, usa piezas ligeras (con menor fondo y patas que les den “aire”) y completa el espacio con sillones o asientos auxiliares.
- En habitaciones más amplias es mejor elegir sofás en “L” o con rinconeras. El chaise longue es una opción cómoda y que proporciona asientos extra.
- Por último, la altura del respaldo es importante. Para garantizar el máximo confort, debe tener como mínimos de 85 a 90 centímetros. Pero si va a estar delante de una ventana hay que tener cuidado para que no sea demasiado alto y tape la entrada de luz.
Estructura del sofá
La estructura es tan importante como el diseño. Es lo que marcará la diferencia entre un sofá “que dure muchos años” o uno para salir del paso.
La madera maciza es conocida por ser bonita y resistente, pero también hay opciones buenas y más baratas como un contrachapado de alta calidad.
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Una buena estructura también ayuda en la comodidad.
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En muchas ocasiones puede encantarnos un sofá pero al sentarnos, vemos que no resulta cómodo. No queremos estar incómodos mientras disfrutamos de una película o pasamos el rato con los nuestros, por lo que, siempre que puedas, es mejor probar el sofá antes de elegirlo.
Respecto al relleno de los almohadones, es mejor elegir los de espuma ya que tardan más en deformarse y perder su forma que los de pluma, que tendrás que ahuecar cada vez que se usen.
En Dröm Factöry creemos que el sofá es una parte muy importante del salón. En nuestra tienda podrás encontrar sofás Atemporal, única empresa nacional productora de mueble tapizado en rechazar el uso de ninguna materia prima de origen animal.
Ven a vernos y te ayudaremos a elegir el sofá que más de adapte a tu estilo y a tu salón.
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